Desarrollar Inteligencia Emocional en l@s niñ@s puede ayudarles en el futuro a llevar una vida feliz.
Por momentos nos vemos sobrepasados por el estrés de una rabieta o por el conflicto ante una situación y en esos casos nuestro cerebro y el de l@s niñ@s se descontrolan haciendo o diciendo cosas que no son alentadoras o respetuosas para nadie y de las cuales luego nos arrepentimos.
Una forma de retomar el control y volver a la calma es el llamado Tiempo Fuera Positivo (TFP) que permite sentirnos mejor y así poder resolver situaciones complejas. En vez de castigar o enviar al niñ@ a su habitación podemos acudir al TFP: un espacio y un tiempo para calmar los ánimos y ayudar a l@s niñ@s a sentirse mejor y de esta forma auto-regular las emociones.
Un lugar de calma con algún juego, lectura, música, fotos familiares, etc. que facilite recuperar la paz. Explícale a tu hij@ que cuando los ánimos estén alterados (rabia, enojo, etc.) puede acudir a este espacio para sentirse mejor y dile también que cuando ambos estén más tranquilos podrán conversar de lo ocurrido. La idea es darle seguimiento a lo que causó ese estado, ahora sí, de una forma más respetuosa y calmada.
Está comprobado que l@s niñ@s se portan bien cuando se sienten mejor y es muy probable que ante un estado de enojo, malestar o rabieta se lleguen a actitudes irrespetuosas que no permitan lograr algún acuerdo. Por eso es muy importante conversar con l@s niñ@s en algún momento de calma, respecto al Tiempo Fuera Positivo: para qué existe (calmarse y sentirse mejor), qué cosas se pueden hacer en este lugar (jugar, leer, escuchar música, descansar, etc.), cuánto tiempo se puede estar (el necesario para alcanzar la calma).
Los niñ@s se portan bien cuando se sienten mejor.
Es importante mencionar que llegado el momento del descontrol, enojo o rabieta, el adulto puede "invitar" al niñ@ a calmarse acudiendo al TFP, para que luego, cuando estén más tranquilos puedan conversar de forma respetuosa y reflexionar respecto de lo ocurrido. Es valiosa la instancia del "seguimiento" (conversación posterior) a efectos de encontrar la forma armoniosa de resolver los problemas. En algunos casos, luego del tiempo de enfriamiento, podrás darte cuenta que no será necesario una conversación posterior dado que el tema no revestía demasiada importancia. En todos los casos, lo importante es lograr auto-regular las emociones sabiendo qué hacer para alcanzar la calma.
Algunas familias le ponen un nombre especial al TFP para convertirlo en algo más cercano: "Rincón de la Calma", "Palacio de la Paz", "Espacio Tranquilo". Puedes preguntarle a tu hij@ que nombre ponerle y qué cosas podría tener este espació (fotos, juegos, instrumentos musicales, etc.) que pueda servir después para alcanzar la calma.
Cuando llegue el momento y lo sientas necesario podrás decirle a tu hij@: "¿te ayudaría estar un ratito en tu Rincón de la Paz para que te sientas mejor?" Si te dice "no" puedes decirle: "¿Te gustaría que te acompañe a tu Rincón de la Paz?" (Esto podría ser muy alentador) Y si aún insiste con un "no", podrías decirle: "Bueno, te entiendo...yo si creo que necesito un momento para estar más tranquila" Esto podría transmitirle un aprendizaje de como lograr auto-regulación emocional. Si te retiras a buscar tu calma, asegúrate de que tu hij@ quede a resguardo de cualquier situación de peligro ante su estado de enojo.
Considera que la mejor forma de solucionar un problema es evitar su ocurrencia y si en todo caso llegase a ocurrir, la mejor forma de lograr un acuerdo y entendimiento respetuoso para todos es con los ánimos calmados concibiendo amorosamente al otro y buscando entender 1ro. para luego ser entendido. www.disciplinapositiva.cl